Después de días duros de faena en el blog, llegó el momento de poder hacer una escapada. Decidimos continuar un poco más en el Penedès, antes de adentrarnos en nuevas tierras y experiencias. Indagando un poco, dimos con el biohotel Cal Ruget, un hotel rural que se encuentra en Vilobí del Penedès, a 50km de Barcelona y de Tarragona.
El lugar es precioso, tranquilo, con vistas a los viñedos y completamente aislado del bullicio. Las vistas en Cal Ruget son fantásticas, con la montaña de Montserrat al lado, tan hermosa y especial. Nos habían hablado de este lugar unos compañeros, y realmente no nos aconsejaron en balde. Después de unos copiosos desayunos, puedes ir de paseo por los campos o en bicicleta (o burricleta, una bicicleta eléctrica) a visitar las masías cercanas. Los payeses y dueños de las fincas son gente cercana, que reciben a los turistas como si fueran de su familia, y no dudan a la hora de ponerte al día de las historias locales.
Existen diversas rutas a realizar en la zona, y los amantes del deporte y la naturaleza disfrutarán sin duda de este lugar. La buena comida también es un elemento a destacar en Cal Ruget.
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