Entre las muchas Denominaciones de Origen de vinos de España, encontramos la conocida como la Denominación de Origen Toro. Estos vinos son producidos en la zona sureste de Zamora y en el suroeste de Valladolid, ocupando las extensiones conocidas como a Tierra del Vino, el Valle de Guareña y la Tierra de Toro, un total de 62.000 hectáreas con más de 1000 viticultores que se ocupan del trabajo de la zona.
Una de las razones por las que las uvas de la Denominación de Origen Toro son de excepcional calidad es debido a las condiciones climáticas que existen en la zona, fundamentalmente por las temperaturas extremas y las muchas horas en las que se proyecta el sol, fenómenos necesarios para la producción de excelentes vinos.
Los vinos con Denominación de Origen Toro tienen una gran tradición. Desde la Edad Media el tipo de vino elaborado en esta zona es considerado de gran aprecio, concediéndole por ello la venta del producto, mientras que en esta época estaba prohibida la comercialización de otros vinos. Finalmente, la Denominación de Origen Toro, nace como tal en 1987, y en la actualidad cuenta con 51 bodegas y una expansión tanto nacional como internacional.
Dentro de la denominación de este vino podemos encontrar las tres variedades: tinto, rosado y blanco.
El vino tinto es elaborado con la variedad de uva Tinta de Toro, muy semejante al Tempranillo, y que dependiendo del tiempo de producción, tendrá una textura y unos toques diferentes.
En el caso de los vinos rosados de Toro, estos están elaborados con un mínimo del 75% de Tinta de Toro y el resto de Garnacha. Son elaborados con el método en tradicional, con maceraciones cortas en frio, de esta manera se conserva el aroma.
En cuanto a los vinos blancos de Toro, son producidos con las variedades Verdejo y Malvasía y a través de prensa neumática.
Como hemos indicado anteriormente, son 51 bodegas las que pertenecen a la Denominación de Origen Toro, entre ellas podemos destacar los vinos Peña Rejas, Carodorum, Prima o Viñaguareña.
