El diputado de Turismo, Joaquín Albadalejo, presentó recientemente en Pinoso, la primera señalización de la Ruta del Vino de Alicante, acompañado de alcaldes y concejales de los municipios de la zona. Esta iniciativa que cuenta con una subvención de la Conselleria de Agricultura, pesca y Alimentación a través del programa Ruralter Paisaje, se completa con otras tres señalizaciones de delimitación de la ruta en Villena, Novelda y la Mancomunudad de la Vall del pop.
Adicionalmente, se han colocado 65 placas en cada uno de los establecimientos de las poblaciones que forman parte de la Ruta del Vino, entre los que se encuentran bodegas, enotecas, casas rurales, restaurantes o comercios, entre otros.
El territorio en el que se obtienen los vinos alicantinos se divide en dos zonas, distintas en cuanto a sus características de climas y suelos: la cuenca alta y media del río Vinalopó y la comarca de la Marina. Son tierras de escasa pluviosidad, de un clima mediterráneo, donde se cultiva esencialmente cepa Monastrell.
Si unimos el poder de atracción del vino a la gastronomía, el patrimonio cultural y natural, a las fiestas y eventos, la Ruta del Vino de Alicante ofrece gran potencial turístico al visitante que disfruta de una ruta llena de alternativas y de una gran riqueza para el disfrute de sus sentidos.
Albaladejo ha señalado que esta iniciativa permite potenciar un turismo alternativo al de sol y playa, ya que esta provincia cuenta con una larga tradición vitivinícola y unos vinos de excelente calidad. Su objetivo es darlos a conocer al público en general, y a los turistas que visitan la Costa Blanca en particular.